Es difícil aprender inglés en el colegio

 La enseñanza de inglés en los colegios carece de un componente vital y es la contextualización de los contenidos. Se enseña a partir de un modelo estructuralista donde tienen prevalencia los aspectos gramaticales de la lengua, delimitando la profundización en la necesidad comunicativa de los estudiantes. Dicha metodología genera un acercamiento sesgado al aprendizaje de una segunda lengua.

Teniendo esto en cuenta, los niños pierden interés en el idioma. Ellos no pueden comunicarse, no pueden hablarlo, no pueden entenderlo, conllevando a una frustración temprana en lo que se considera una de las mejores herramientas para mejorar la creatividad: aprender una segunda lengua.

Una buena relación con el INGLÉS hoy en día es clave

La mejor solución a este problema es tomar clases particulares de inglés para los niños, que las clases sean un programa libre, didáctico, donde lo que se hace es aprender inglés en contexto, orientado a sus intereses.

Esa es la única manera en que podemos nosotros, por un lado, vencer la relación negativa que crean los niños con el inglés debido al colegio y a la presión. Y en  segundo, lograr que el niño aproveche sus estudios y hable en inglés, que es lo más importante.

El inglés les ayuda a prepararse para el futuro. Cuando entran a la secundaria y a las universidades ahora se les exige que aprendan otro idioma, así que aquellos que ya tienen una base pueden avanzar aún más. En nuestro futuro, el mercado de trabajos requerirá de individuos que ya no solo dominen el inglés sino más idiomas.

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